jueves, 29 de julio de 2010

BILL SIENKIEWICZ, qué raro me parecías

A comienzos de los 90, cuando Chris Claremont era el amo y señor de los cómics mutantes de Marvel, y escogía al dibujante que le daba la gana, realizó un curioso experimento con su serie de Los Nuevos Mutantes, que hasta entonces había tenido un dibujo convencional. Vino un tipo que más que dibujar, abocetaba, pretendiendo transmitir "sensaciones" con el dibujo. A mí aquello se me caía de las manos, y me rompía los esquemas. Los personajes parecían emborronados, bala de cañón comenzó a tener la cabeza plana como frankestein, Warlock era un par de ojos en un espaguetti amarillo, el oso místico una mancha negra con zarpas, y Mancha Solar una silueta. Demasiado para mis catorce años recién cumplidos. Abandoné la serie. Y es que no era el lugar donde desarrollar nuevas fórmulas narrativas, un tebeo de adolescentes con poderes. Y eso que cuando este tío dibujaba el Caballero Luna en los años 70, era un genial imitador de Neal Adams. Pues se ve que se hartó de imitar. En el documental "De Superman a Spiderman" lo vi dibujar en directo una Elektra preciosa en un momento, pero luego cogió un bote de pintura negra y lo chorreó con un cepillito por toda la imagen. "Ya la ha cagado", pensé. Pues de eso nada, cogió su pincel y transformó aquellos chorretones en un efecto de sombras genial, e instantáneo. Y entonces le vi el truco, un dibujo preciosista "ensuciado" un poco. Es sólo un truco que ha aprendido a hacer sumamente bien, y eso es lo que lo ha diferenciado del resto, dedicándose hoy sólo a portadas y póster por los que cobra un pastón. Y claro, luego está el color, con esos brillitos tan chulos a lo Drew Struzan, del que ya tenemos una entrada anterior. Juzgad vosotros mismos.
















jueves, 22 de julio de 2010

BUD SPENCER Y TERENCE HILL







O sea, Astérix y Obélix viajan al presente. En sus pelis siempre había un momento en el que entraban en un lugar plagado de villanos, y allí se liaba parda, con un Bud Spencer dando bofetones que sonaban incluso antes de alcanzar la cara del malo, lo que no era un fallo de sonido, sino que el aire empujado por la gigantesca mano del gordo era lo que comenzaba a volear al villano. En la mayoría de las pelis los personajes ni siquiera eran amigos, sólo se soportaban, pero un mutuo desacuerdo hacia la opresión y un fuerte sentido del bien y del mal imperaban en su filmografía. Repasémosla.
En 2 superpolicías los dos se encuentran buscando un empleo. Cansados y sin trabajo deciden robar un supermercado... sin suerte, por supuesto.. y huyendo entran accidentalmente en la oficina de reclutamiento de la Policía. Tuvo una secuela: 2 superpolicías en Miami, y ya con Terence Hill en solitario y con superpoderes: El superpoli.
En Par- Impar aterrorizan a los mafiosos locales en sus garitos y salvan con ello un orfanato dirigido por una joven y atractiva monja al hacerla participe de las ganancias de los casinos ilegales.
En Estoy con los hipopótamos, luchan con un ejército de matones que se dedica a traficar con animales salvajes. Nuestros amigos, decididos a acabar con esos turbios manejos , lucharán contra los gansters empleando para ello su arma más preciada: los puños.
En Quien tiene un amigo tiene un tesoro, nuestros dos aventureros van en pos de un tesoro escondido en una remota isla de los Mares del Sur, pero se vislumbra lío a la vista con la aparición en escena de un fanático guerrero japonés que aún continúa luchando en la Segunda Guerra Mundial él solito ¡35 años después de que todo el mundo ha firmado el armisticio!
En ¡Más fuerte, muchachos! van a Colombia, donde se mezclan con traficantes y buscadores de esmeraldas.
Pero la mejor de todas es Y SI NO, NOS ENFADAMOS, en la que son pilotos que participan en una carrera de coches cuyo ganador obtendrá como premio un magnífico mini bólido de color rojo. Los dos cruzan la línea de llegada al unísono por lo que el coche es para ambos. Para decicir quien será el que se quede con él, organizan una apuesta, el coche será para el que beba más cerveza y coma más salchichas. Están en pleno "trabjao", cuando a la cervecería llegan unos matones, quienes empiezan a desgtrozarlo todo intimidando a los propietarios ya que desean que éstos abandonen el parque de atracciones donde esta ubicada y dejen paso libre a la construcción de un gran casino. Ostias a mansalva.
Hicieron una desconocida de piratas (El corsario negro) y otra en la que eran Dos Misioneros, que realizan de un modo muy peculiar su acción apostólica.

En Dos super-dos, han de suplantar a dos primos aristócratas de Río de Janeiro, con quienes tienen un gran parecido y que corren un gran peligro.
Otras pelis, ya en su etapa cansina y de poco éxito: fueron dos super-superesbirros, o En Nochebuena se armó el Belén. El resto de su filmografía son Westerns que merecen una entrada aparte, en especial la Saga de Trinidad, de la que hablaremos en otra ocasión. Los políticos, los codiciosos y los taimados, necesitan que Terence Hill y Bud Spencer vengan a hacerles entrar en razón... de un estacazo.

G.I.JOE, MUÑEQUITOS EN MI JARDÍN


Mientras que mis primos compraban el Hovercraft Ballena, una nave inmensa de los G.I.Joe que yo envidiaba, el presupuesto con el que yo contaba sólo daba para hacerme con una nave ártica que no llevaba ruedas, sino esquíes, pero estaba saldada quizá por no ser tan atractiva como los jeeps, tanques y camiones. Así que me la llevé. ¿Y qué hacía una nave-trineo en la arena de las playas de Almería? ¿O en las "junglas" del césped de mi jardín? El resto de mi equipo de Joes era bastante ecléctico: Un buzo (skuba), un bombero (Kurt), y un buscador de minas (Sgto Láser). Con tan imposible combinación: ¿Cómo idear aventuras con un argumento no rallano en lo ridículo? Pues lo hacía: Una ola barría la antártida, que se fundía, debiendo el buzo recuperar minas de tierra que se habían vuelto submarinas. Aparcaba la nave en los skimers de la piscina, mientras los muñecos bajaban a bucear. Y la maquinaria de la depuradora era la base de cobra. ¿Y el bombero? ¡Pues era un traidor, ja, ja!

lunes, 19 de julio de 2010

DRAGON BALL: ¿la mejor serie de animación jamás vista? (primera parte)


Que nadie se sienta engañado: fui un fan acérrimo de Dragon Ball en mi adolescencia, y ahora no es -para nada- odio lo que siento por este fenómeno, de manera que no espero contar con el beneplácito de quienes a fuerza de secuelas, spin-offs y pokemon varios, identifican la magna creación de Akira Toriyama con el mundo cursilón de la mayoría del universo manga-anime actual.

Así solía autorretratarse Akira Toriyama. Nunca se han difundido muchas imágenes suyas.

Dragon Ball, o Bola de dragón, es una serie de cómics que comenzó a escribir y dibujar Toriyama allá por 1984 para la revista de cómics para chicos Shonen Jump, concluyendo oficialmente su publicación en 1995. El éxito del cómic fue aplastante, y no tardó en aparecer una serie de televisión a su medida, en 1986, que era una traslación prácticamente exacta de las viñetas al formato audiovisual. Aquí empezamos a verla en Canal Sur por las tardes, en episodios que emitían sueltos y sin continuidad para rellenar espacios vacíos de la parrilla y molestando de paso a quienes intentábamos ver otras cosas. Al final tuvimos que fijarnos.

Portada del nº 1 de la edición española.

La historia se centra en el personaje de Goku, un fortísimo chaval que tiene cola como los monos, y que cuenta con un bastón que se alarga cuando se le pide. Una chica llamada Bulma llega a su casa, en las montañas, buscando las míticas siete bolas de dragón, que conceden un deseo a quien sea capaz de reunirlas. A partir de aquí, ambos vivirán una serie de aventuras en plan "road movie" que irán, por una parte, introduciendo nuevos personajes como el bandolero guaperas Yamsha o el cerdo mutante Oolong; y por otra, descubriéndonos el particularísimo universo en el que va a desarrollarse toda la serie, poblado de animales que viven y se comportan como humanos, dinosaurios que campan por el campo y avances tecnológicos asombrosos como las cápsulas hoi-poi, patentadas por el padre de la propia Bulma, con las que puede guardarse cualquier cosa a tamaño de bolsillo. Por cierto, aun tratándose de una serie y un manga japoneses, la ambientación es claramente china.

Intro en español. Todavía entonces se molestaban en traducir las canciones del japonés.
Luego vinieron los concursos de karaoke para otakus.

Pese a que el planteamiento es principalmente de aventuras, el desarrollo de la historia se decanta en algunos puntos hacia las artes marciales, con la aparición del maestro Tortuga Duende (Mutenroshi), y el pequeño monje shaolín Krilín. Así, al final de cada temporada y tras reunir las bolas de dragón una y otra vez con inesperadas consecuencias, los personajes se reúnen en el Gran Torneo de las Artes Marciales, colofón de cada tramo del argumento. Todo ello va revestido de un sentido de la épica propio del género de aventuras más clásico, y de un fuerte sentido del humor con un ligero toque picante en algún punto.

Cómo venció Krilín al hombre invisible.

Aun pareciendo sencilla de explicar, esta serie hunde sus raíces en una gran cantidad de referencias populares. La más importante, al menos en su primer tramo, es Viaje al oeste (1590), clásico de la literatura china del que se extraen personajes como sobre todo el propio Son Goku (en el libro, Sun Wukong, el invencible rey mono poseedor de un bastón mágico que viaja en una nube).

Son Goku volando en la nube Kinton.

También están ahí, más o menos de forma evidente, otras obras más recientes como El señor de los anillos (de ahí la multirracialidad del grupo de protagonistas, el carácter mítico otorgado a las bolas mágicas, el planteamiento de la historia como viaje por un vasto continente, o -pillado por los pelos, lo admito- el personaje de Mutenroshi, algo así como un Gandalf obseso sexual), La guerra de las galaxias (¿no es Yamsha Han Solo? ¿no es el ejército del lazo rojo tan pseudo-nazi como el Imperio Galáctico? ¿no nos recuerdan muchos de los diseños de edificios y artefactos a lo visto en la saga de Lucas?) y los cómics de la revista francesa Metal Hurlant, donde despuntaba gente como Moebius y El Incal.

Portada de The Worlds of Akira Toriyama, popular libro de ilustraciones.

¿Qué actuaría en favor de considerar Dragon Ball como mejor serie de animación jamás vista? Creo que se lo debe sobre todo a su carácter abierto a cualquier clase de público, tanto infantil como plenamente adulto; a sus personajes endiabladamente complejos, redondos y multifacéticos, como quizá nunca se habían visto antes en una serie animada; y a una enorme complejidad narrativa con multitud de personajes y eventos, tramas, subtramas (¿alguien recuerda el crossover con Dr. Slump, la otra serie de Toriyama?) e hilos argumentales interconectados.

La pandilla original de Dragon Ball en sus mejores tiempos.

Como muchas veces ocurre, eso sí, el éxito de la serie -que fue emitida en casi todo el mundo, a veces ligeramente censurada- hizo que se prolongase más de lo debido, inclinándose al final casi toda hacia otras formas de hacer las cosas. ¿Perdió Toriyama el control de su propia obra? ¿Le empezó a gustar demasiado el dinerillo? Eso lo veremos en la segunda parte.

miércoles, 14 de julio de 2010

LOS NUEVOS GENTLEMEN




La obra de Alan Moore, de la que esperábamos ansiosos el tercer volumen, se ha convertido en un experimento que trata de aunar TODA la ficción literaria del siglo anterior, dejando de lado el reconocible equipo que vimos trasladado al cine, y asumiendo nuevas encarnaciones de la Liga, de los que sólo quedan Mina y Quatermain rejuvenecido. No se nos cuentan sus aventuras con Randolph Carter contra las criaturas de Lovecraft, ni se nos narra cómo conocieron al Próspero de Shakespeare ni a Orlando (nueva adquisición junto a Carnacki y el ladrón Raffles). Lo peor es que el segundo volumen es en los sesenta, y el último en la actualidad, así que esto se ha terminado. Ya no es la liga, sino otra cosa. Y es que cuando todos esperábamos más aventuras incardinadas en ese mundo victoriano, Alan Moore sorprende nuevamente tirando la casa por la ventana, y ninguno sabemos por dónde va a tirar. Aunque en los sesenta mezclará psicodelia y magia, eso seguro. Y seguirá aunando a los arquetipos fantásticos de cada década.

lunes, 12 de julio de 2010

FREDDY KRUGER




Este verano se estrena el remake de Pesadilla en Elm Street, serie de películas que desplazaron al Hombre Lobo como mi principal terror, e instauraron a Freddy como lo más escalofriante. De la primera pesadilla recuerdo la cama engullendo a Johnny Deep. La segunda era muy mala, y ha quedado demasiado vieja, además creo que era un caso de posesión, con Freddy queriendo volver al mundo real. Sólo se salvaba el comienzo en el autobús escolar, porque clavó exactamente cómo funciona una pesadilla (te lleva donde no quieres ir). La tercera dio el pistoletazo para crear la franquicia imparable, con los chavales unidos en un sueño hipnótico en el que eran guerreros que luchaban con el Mal, con guiño a Harryhausen incluido en el esqueleto de Freddy recompuesto y surgido de su tumba. La cuarta convertía a Freddy en un dibujo animado, y el espectador ya no se horripilaba, sino que aplaudía los chistes del malo. La quinta la vi en un cine de verano, al igual que la sexta que además regalaba unas gafas 3-d para los últimos diez minutos. Luego Wes Craven hizo una última peli sobre la metaficción de la que impresionaba el túnel de sábanas a lo País de las Maravillas. Freddy vs. Jason era un engendro sin pies ni cabeza. Y esta nueva, sin Robert Englund, será la NOVENA peli sobre el personaje. ¿Volverá a dar miedo? La fuerza de Freddy es que temías encontrarlo en alguna pesadilla. Era el hombre del saco definitivo. Los adolescentes de ahora ya no son tan asustadizos. Freddy, muérete para siempre, me prometieron siete veces que no volverías a levantarte de la tumba, pero te resucita el auténtico mal, que es el dinero.

LA ÚLTIMA HISTORIA DE BATMAN


Sólo tengo unos doce cómics de Batman en mi colección, pero son los mejores (El Año Uno, la Saga de Neal Adams, el Dark Night, la Broma Asesina, y el Arkham Asylum) pero Neil Gaiman ha escrito el cómic final del murciélago, que podrá considerarse la última historia ahora y dentro de 20 años, tal y como han hecho Grant Morrison y Alan Moore con Superman. Se titula: ¿Qué le ocurrió al cruzado de la capa? Y es un teatrillo de personajes que desfilan ante el féretro de Batman explicando cómo ha muerto. Andy Kubert, el dibujante, homenajea a Bob Kane, Dick Sprang, Miller, Bolland, Adams, Kelley Jones. Lo más emotivo es ver al fantasma de la madre de Bruce Wayne diciéndole que por mucho que luche, jamás podrá traer a sus padres de vuelta. Y el final, con el niño cerrando el tebeo y la bat-señal convirtiéndose en unas manos maternales. Es una carta de amor que demuestra que Gaiman sigue escribiendo mejores cómics que novelas.

NOCHE DE MIEDO


Peli ochentera de Tom Holland, que luego creo que hizo el Muñeco Diabólico. Trataba de un chaval que descubría que su vecino era un vampiro. Ni su novia ni su madre le creían, así que acude a un actor que encarna a un cazavampiros en la televisión. Me encanta el duelo final en el que el vampiro les dice a los dos "Bienvenidos a la Noche de Miedo. La auténtica". Tuvo una secuela malísima en la que la hermana del vampiro venía buscando venganza, con un hombre lobo y un no-muerto en patines. Los estudios DreamWorks tiene la intención de sacar adelante una nueva versión. A ver a quién fichan para dirigirla: (SAM RAIMI, por favooorrr, síii)

domingo, 4 de julio de 2010

MUCHO ANTES DE J.J. BENÍTEZ


En este número de GALAXIA, dos sabios, uno descreidillo y otro católico, descubren la máquina del tiempo. Tras tontear entre dinosaurios y hordas tártaras en el primer fascículo, se adelantan veinte años al delirante J. J. Benítez y su Caballo de Troya y se van a Jerusalén y presencian la muerte de Jesucristo... El escéptico se convierte al cristianismo, mientras el otro deviene apóstol.

KELLY "OJO MÁGICO"


Tim Kelly será quemado, acuchillado, aplastado, hervido, macerado de todos los modos saliendo siempre indemne, porque porta el legendario talismán inca del "ojo de Zoltec", que convierte en invulnerable a quien lo porta. Otro héroe de la fleetway, como el anterior (Mytek) o Zarpa de Acero, de quién hablaré en otra entrada (Planeta acaba de reeditar a Steelclaw)

MYTEK EL PODEROSO


Publicado por mundicomics, Mytek era un gorila robot complejo y capaz de pensar por sí mismo. Lo crea un sabio loco, con el único objeto de que los revoltosos nativos vecinos dejen su laboratorio en paz, porque Mytek es su dios-gorila. Su ayudante jorobado se hará con el control del simio mecánico, lanzándose a una orgía de hecatombes y cataclismos en la que no deja títere con cabeza. Así desahoga todo el resentimiento que acumula contra el mundo, que no es poco, desde luego. Una amalgama de Mazinger-Z con King-Kong.